Cambio manual o automático: cuál es mejor
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Los años de experiencia de MAPFRE en el sector de la automoción nos avalan como fuente de información veraz y práctica que te ayuda en el día a día de tu vehículo.
La caja de cambios manual. Ventajas e inconvenientes
Ventajas
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Ayudan a generar comportamientos a gusto del conductor, ya que una vez tomado el pulso del embrague se consiguen comportamientos del vehículo más personalizados según el cambio de marchas, las revoluciones que se impriman, el freno motor mediante reducción de relaciones, etc.
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Más baratas porque tienen un menor coste de fabricación con diferencias de precio que oscilan entre 1.000 y 2.500€ según el tipo de coche.
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Precisión en la conducción con un control más milimétrico del vehículo, especialmente en maniobras a punta de gas, pendientes y mediante anticipos de cambio con la experiencia del uso del cambio manual.
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Una conducción con más encanto y emoción, ya que la conexión entre el conductor y el vehículo es mayor que con cambio automático lo que se argumenta también por la defensa del cambio manual sin duda de los grandes expertos, que siguen confiando en esta trasmisión que les aporta una conducción mucho más emocional.
Fuente: revista Motor Mundial
Inconvenientes
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El cambio manual camina hacia la extinción ya que el crecimiento esperado de los coches eléctricos y de los vehículos autónomos condenan a esta trasmisión en el futuro (los eléctricos carecen de marchas al igual que la autonomía de conducción).
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El cambio manual es más incómodo, ya que obliga al conductor a estar más pendiente de las necesidades del motor, aunque la mayor parte de los conductores tienen perfectamente asimilados los cambios de marcha de forma instintiva, aunque a veces el pie izquierdo precisa ciertos descansos.
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El cambio manual se avería con más frecuencia debido a su estructura de construcción y a su uso forzado e incorrecto, aunque sus reparaciones suelen ser menos costosas y más simples, pero afectan a otros mecanismos (embrague,…).
La caja de cambios automática. Ventajas e inconvenientes
Fuente: revista Motor Mundial
Ventajas
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Cada vez hay más vehículos con cambio automático. Hace años solo estaban disponibles en coches de lujo pero en la actualidad casi todos los compactos tienen su versión automática. Como consecuencia la popularidad del cambio automático está creciendo hasta el punto en que actualmente es casi imposible acceder a deportivos potentes o súper deportivos con cambio manual.
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La transmisión automática mejora constantemente, pasando cada vez más del comportamiento aburrido y plano del típico convertidor de par automático, hacia un comportamiento que se aproxima cada vez más al de un conductor humano con cambio manual.
Fuente: revista Motor Mundial
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Las cajas de cambio automáticas se suelen asociar a mejores y mayores tecnologías, ya que hay muchas nuevas tecnologías que precisan transmisión automática para su gestión (conducción autónoma), como es el caso de los controles de velocidad inteligentes, los sistemas de parada y arranque, las frenadas de emergencia automáticas, etc.
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Las trasmisiones automáticas suelen ofrecer un modo manual, para mantener el control del cambio de las relaciones, sea con modo manual que secuencial, de manera que el conductor decide los momento de insertar cada marca (con palanca o mediante levas en el volante).
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Mayor comodidad, sobre todo en lo relativo al día a día, especialmente en conducción urbana ya que la ausencia del tercer pedal y de la manipulación de la palanca de cambios permite una conducción de gran comodidad.
Inconvenientes
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Consumos mayores, pero que poco a poco se van reduciendo gracias a las nuevas tecnologías que los fabricantes vienen desarrollando, que se basan en empujes más continuos sin interrupciones entre las marchas (por ejemplo las trasmisiones DSG…).
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Mantenimientos más caros, aunque con periodos más espaciados, pero con facturas bastante superiores al pasar por taller debido a su mayor número de piezas móviles y electrónica.
Fuente: revista Motor Mundial
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Sensaciones y emociones más reducidas, aun disponiendo de modo manual, al faltar siempre el embrague y la palanca de cambio de toda la vida, con un tacto muy filtrado y en ocasiones algo lento, se pierden en parte las sensaciones personales del conductor.
Con todas estas descripciones, entendemos que cada usuario dispone de suficientes argumentos en función de sus gustos para decidir entre una trasmisión manual o automática en su vehículo de uso personal.
Manual o automático, sea cómo sea el vehículo que elijas, recuerda protegerlo con el Seguro de Coche MAPFRE que se adapta a tus necesidades.
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