Talleres rápidos, ¿son recomendables?

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En la radio, en la televisión, en los medios impresos e incluso en las vallas publicitarias vemos muchos anuncios de las cadenas de talleres de servicio y mantenimiento rápido. Marcas como Aurgi, Midas, First Stop o Norauto, nos suenan a todos y son usadas por cientos de miles de usuarios cada año. Pero, ¿cómo son los servicios que ofrecen? ¿Es recomendable usarlos o es mejor ir al taller oficial? Aquí te damos algunos consejos sobre las cadenas de talleres de servicio rápido.

Qué servicios ofrecen

En general ofrecen todo tipo de mantenimiento sencillo como puede ser el cambio de aceite, refrigerante o la inspección pre-ITV, así como la sustitución de piezas desgastadas como neumáticos, frenos, amortiguadores, escape, bujías o baterías. En algunos establecimientos de cadenas de servicio rápido incluso hacen instalaciones de equipos de audio y suelen tener tienda de recambios y accesorios.

Hay algunos, pero son pocos los talleres de cadenas que están especializados en grandes trabajos como las reparaciones de chapa y pintura, las averías de motor, transmisión o del sistema eléctrico, reparaciones de dirección o suspensión, sustitución de aparatos electrónicos del coche o diagnosis del vehículo.

Para qué son buenos

Debido a los precios más bajos comparados con los talleres de marcas oficiales, los talleres de servicio rápido para el coche son buenos para realizar sustituciones sencillas de piezas consumibles por otras nuevas como los neumáticos, la batería, las bombillas halógenas o el gas del aire acondicionado, aunque es recomendable comparar precios antes. Son sustituciones que cualquier mecánico cualificado puede realizar. También se pueden hacer algunos servicios de mantenimiento más completos, como el cambio de aceite, cambio de amortiguadores, revisión del sistema de frenado o el del sistema de escape.

Precauciones

En caso de que el coche sea prácticamente nuevo y esté aún en garantía, si no se quiere ir al taller oficial, hay que tener el cuidado de seguir el mantenimiento estipulado por la marca y que el taller selle el libro de mantenimiento. Desde la normativa aprobada en 2010 no se pierde la garantía siempre que se siga el mantenimiento que pide la marca.

Si vas hacer uso de los servicios de una cadena de talleres, por ejemplo, para cambiar el aceite, los neumáticos o la batería, asegúrate de que se monten productos de calidad, de marcas reconocidas. No te dejes convencer por los precios de marcas “low cost” sobre todo en el caso de los neumáticos, frenos, amortiguadores y otros elementos que afectan a la seguridad. Y antes de aceptar el servicio, compara el presupuesto que te ofrezcan con el que te daría el taller oficial de la marca o de un taller independiente de confianza, que pueden ser aún más económicos en algunos servicios.

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