Movilidad urbana: transportes alternativos al coche

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Las restricciones al tráfico y al aparcamiento que se están realizado en las grandes capitales españolas como Madrid o Barcelona, hacen que el uso de los vehículos de combustión, tengan cada vez más problemas para considerarse para los usuarios como el principal medio de transportes. Ante la necesidad de movilidad de las personas, en las grandes ciudades con el objetivo de reducir el tráfico y las emisiones contaminantes a la atmósfera provocadas por los tubos de escape de los vehículos, en algunas ciudades ya se opta por la promoción de la utilización primordial de transportes alternativos al coche.

Movilidad en las grandes ciudades

A la hora de moverte puedes hacerlo de muchas formas, dependerá sobre todo de la distancia que debas recorrer, el tiempo con el que cuentes y las necesidades personales de horario y movilidad. Por ello, cada persona prefiere distintos medios de transportes. La gran mayoría viaja en su propio coche, el problema es que en las grandes ciudades, debido a la gran cantidad de personas que se desplazan cada día, el uso del coche particular es un problema más que una ventaja.

Muchas de las personas que viajan en sus coches lo hacen en trayectos cortos y van solos, con lo que el precio por trayecto es mayor. Debido a los atascos y aglomeraciones el consumo de combustible también aumenta y las emisiones de gases contaminantes son superiores y hacen que en algunas ciudades como Madrid o Barcelona se apliquen protocolos anticontaminación que consisten en restringir la entrada de vehículos de combustión al centro de las ciudades.

En los últimos años, estas grandes ciudades han tenido que activar estos protocolos en más de una ocasión, por ello, se ha optado por aplicar otras serie de medidas encaminadas a reducir las emisiones de gases contaminantes y a facilitar la movilidad de las personas por las ciudades. En Madrid, por ejemplo, debido a los problemas del tráfico, las emisiones de gases y los problemas de aparcamiento en algunos barrios de la ciudad, se ha procedido a la eliminación de la zona azul, para evitar que accediesen los vehículos de los no residentes, y se han establecido Áreas de Prioridad Residencial (APR).

Otro de los principales alicientes para dejar el coche en casa y optar por otros medios de transporte alternativos es el precio del combustible. En los últimos años, ha comenzado a adquirir precios cada vez más elevados y la tendencia es que los impuestos a los carburantes sigan aumentando cada vez más. Junto al gasto que supone el combustible, el coche requiere un mantenimiento periódico y su reparación, por ello, puede suponer gastos adicionales que pueden solucionarse con el uso de vehículos de otro tipo. Recuerda, que para poder circular con un automóvil, deberás tener el permiso de la ITV en regla y contratado un seguro. MAPFRE cuenta con una amplia gama de seguros como el de coche, que te cubre ante cualquier imprevisto.

Transportes alternativos al coche para las grandes ciudades

Debido a la problemática medioambiental y de movilidad de las personas en las grandes ciudades, es necesario la aplicación de protocolos y medidas que faciliten el desplazamiento de manera sencilla, a poder ser a precios más económicos y de una forma respetuosa con el medio ambiente.

El aire contaminado por la acción de los vehículos de combustión es muy perjudicial para la salud ya que contienen micropartículas que son inhaladas por las personas y que puedan empeorar enfermedades respiratorias como el asma o las alergias, además de aumentar el riesgo de cáncer y otras dolencias. Por ello, es importante la concienciación en este aspecto, sobre todo en grandes urbes y las que viven millones de personas.

Para poder desplazarte libremente tienes varias alternativas. La más ecológica y saludable de todas es hacerlo andando o corriendo. De esta forma te desplazas y a la vez haces ejercicio. Puede ser útil en distancias moderadas, si la distancia es muy grande es mejor que optes por el uso de bicicletas convencionales. Estas también te permitirán moverte de forma rápida por la ciudad si circulas por los carriles habilitados para tal fin. En algunos países como Holanda en los que el uso de la bicicleta está muy extendido, disponen de cientos de kilómetros de carril bici y de áreas prioritarias para el transporte en este medio. Debido al volumen de bicicletas y a la cultura de estos países, los centros de trabajo disponen de lugares habilitados para la reparación y protección de las bicicletas además de vestuarios y duchas para que los trabajadores puedan desplazarse de esta forma al trabajo.

En España, las grandes ciudades ya disponen de servicios de alquiler de bicicletas para que puedas desplazarte de forma cómoda si no dispones de una bici en propiedad. Existe la posibilidad de alquiler de bicicletas eléctricas o de pedalada asistida para facilitar a los usuarios su desplazamiento. Son sencillas de utilizar y cero emisiones. El problema, es que muchas de estas bicicletas de alquiler proporcionadas por los ayuntamientos, tan solo están pensadas para su uso en el centro de las ciudades por lo que las personas que viven en la periferia deberán optar por otro tipo de transporte.

Los patinetes o patinetes eléctricos también son una buena opción para desplazamientos por la ciudad y en distancias no demasiado grandes. En ciudades como Barcelona su uso está muy generalizado y podrás ver a cientos de patinadores equipados con sus cascos moviéndose libremente por las calles de la ciudad condal de una forma rápida y respetuosa con el medio ambiente.

¿Qué es el carsharing?

Otra opción alternativa es el uso de vehículos de alquiler o compartidos. En este apartado encontrarás transportes para todos los gustos, desde las bicicletas que señalábamos más arriba hasta los coches o motos eléctricas que verás ubicados en diversos puntos de algunas ciudades.

Mediante una aplicación podrás localizar tu coche o moto eléctrica más cercana y abrirla. Una vez que ya la tienes podrás moverte por cualquier zona y aparcar en el lugar que necesites. Tan solo se te cobrará por el tiempo que has utilizado el vehículo. Uno de sus principales problemas, al igual que en los alquileres de bicicletas es que tan solo podrás usarlos en determinadas áreas de las ciudades y en casi ninguna podrás desplazarte en ellos hasta la periferia.