Tiempo de lectura: 3 minutos

Los ángulos muertos del coche son una de las zonas más peligrosas para conductores ciclistas, motoristas y peatones ya que suponen una pérdida de visión para la persona que maneja el vehículo. En muchas ocasiones los sistemas con los que viene equipado el automóvil no son suficientes y es necesario disponer de dispositivos de seguridad proactiva que ayuden a evitar accidentes.

¿Qué es un ángulo muerto?

El ángulo muerto o punto ciego es la parte trasera del coche que el conductor no puede ver a través de los retrovisores del vehículo debido a la estructura propia del automóvil o a la incorrecta orientación de los espejos.

Estos ángulos muertos se concentran en la parte posterior al conductor y quedan parcialmente cubiertos por los espejos. Por su parte el campo delantero es amplio y permite controlar la gran mayoría de los elementos que tenemos ante nosotros. El uso de dispositivos que permitan visualizar la parte de atrás de un coche son absolutamente necesarios para conducir con seguridad por cualquier carretera independientemente del tráfico que tenga.

Desde hace ya muchos años, los coches vienen equipados con tres espejos retrovisores, dos situados exteriormente en los laterales del vehículo y otro centrado en el interior del habitáculo. Gracias a ellos se logra cubrir el mayor campo de visión de carretera en la parte posterior del vehículo. A pesar de que ahora todos los automóviles poseen esta equipación, aun podrás ver coches antiguos que tan solo tienen el espejo izquierdo (el del conductor) y el central. Ahora se nos haría impensable poder circular sin usar el derecho, sobre todo en desplazamientos por ciudad.

El mantenimiento de los espejos es algo esencial porque son una medida de seguridad muy importante para tu coche. En ocasiones debido a un golpe fortuito o una mala maniobra de aparcamiento se pueden dañar, por ello es conveniente que cuentes con el Seguro de Coche MAPFRE para reparar o sustituir cuanto antes el espejo dañado.

¿Cómo puedes evitar los ángulos muertos?

Para evitar al máximo estos puntos ciegos lo primero que debes hacer es ampliar tu campo de visión trasera ajustando correctamente los espejos retrovisores antes de empezar a circular. Deberás estar parado en una zona llana y sentarte lo más erguido posible en el asiento para lograr el mayor campo de visión. A continuación mueve el espejo hasta que te permita ver la mayor parte trasera de la calzada. En cuanto al coche, deberás ver la parte lateral posterior para mantener la visión espacial. De la misma forma coloca el espejo derecho.

En cuanto al espejo interior, deberás colocarlo de manera que veas toda la luneta trasera, de esta manera controlarás a los vehículos que circulen detrás de ti por la carretera. Debes tener especial cuidado si sueles viajar en moto o bicicleta ya que estos ángulos muertos serán tu peor enemigo. Intenta evitar colocarte en ellos para que el conductor siempre pueda verte.

Por otro lado, además de las medidas tradicionales, algunos modelos de coches más modernos ya vienen equipados con sistemas de seguridad proactiva llamados BLIS (Blind Spot System) o lo que es lo mismo un mecanismo que detecta objetos situados en los puntos ciegos.

Mediante sensores y cámaras situadas en la parte trasera y lateral del coche el sistema detecta los objetos cercanos y notifica al conductor en qué lado se encuentran mediante una señal luminosa en el espejo para avisarle del peligro y evitar que realice una maniobra que pueda provocar un accidente.