El ralentí es el régimen mínimo de revoluciones por minuto (RPM) que permite al motor mantenerse encendido sin acelerar. Su principal función es garantizar que el motor siga operativo en situaciones como detenerse en un semáforo o arrancar. Además, estabiliza el circuito de lubricación e inyección antes de exigir carga al motor.
¿Qué funciones cumple el ralentí?
El ralentí mantiene el motor encendido sin intervención del piloto, incluso en parado. Además:
- Permite el funcionamiento de sistemas eléctricos como luces, refrigeración e inyección.
- Facilita el calentamiento del motor en sus primeras fases de uso.
Ralentí en motos modernas de inyección vs carburador
Las motos con carburador incluyen un tornillo externo que permite ajustar el ralentí manualmente.
En cambio, las motos con inyección electrónica regulan el ralentí automáticamente mediante la centralita y una válvula de aire auxiliar (IAC), que se ajusta en función de parámetros como la temperatura del motor o la carga eléctrica. En estos casos, cualquier ajuste requiere intervención técnica o software especializado.
¿Cómo regular el ralentí de la moto?
Motos con carburador
El ralentí puede ajustarse manualmente con el tornillo correspondiente.
Pasos generales:
- Calienta el motor a su temperatura de funcionamiento.
- Localiza el tornillo de ralentí (junto al carburador).
- Ajusta:
- Sentido horario: aumenta las RPM.
- Sentido antihorario: las reduce.
- Logra un régimen suave y estable (normalmente entre 1.000 y 1.500 RPM, según el modelo).
Ejemplo: una moto de 250 cc puede requerir unas 1.200 RPM, mientras que una de 125 cc necesitará algo menos.
Motos con inyección
No disponen de tornillo manual de ajuste, la gestión es electrónica.
En este caso:
- La centralita regula el aire automáticamente mediante la válvula IAC.
- Para cualquier ajuste se necesita una herramienta de diagnóstico o, si fuera el caso, limpiar la válvula.
¿Por qué el ralentí puede volverse inestable?
Un ralentí inestable genera vibraciones y puede provocar que la moto se apague en parado. Las causas más comunes son:
- Suciedad en el carburador o válvula IAC.
- Fugas de aire por juntas o mangueras dañadas.
- Sensores defectuosos, como la sonda lambda.
- Tornillos de mezcla desajustados en carburadas.
- Problemas eléctricos como batería baja o fallos de carga.
Cómo detectar y solucionar un ralentí inestable
Diagnóstico
Detecta el problema si las RPM fluctúan sin motivo, sientes vibraciones o el motor se apaga al detenerte.
Soluciones según el tipo de moto
- Carburador:
- Limpieza del carburador.
- Ajuste de tornillos de mezcla y ralentí.
- Comprobación de mangueras y juntas.
- Inyección:
- Limpieza o sustitución de la válvula IAC.
- Revisión de sensores y mangueras.
- Reset de la centralita con escáner si es necesario.

Fuente: revista Motor Mundial
Consejos prácticos
Consulta siempre el manual del fabricante antes de ajustar el ralentí.
Otros consejos:
- Haz el ajuste con el motor caliente.
- Trabaja en un área ventilada y usa guantes.
- Utiliza las herramientas adecuadas (en carburadores múltiples, un bufómetro puede ayudar).
- Tras el ajuste, haz una prueba para comprobar que las RPM se estabilizan al soltar el acelerador.
- Si el problema persiste, acude a un profesional.
Mantener el ralentí estable mejora el arranque, reduce vibraciones y evita apagones inesperados. Además, ayuda a prolongar la vida útil del motor, lo que convierte su revisión en una tarea clave dentro del mantenimiento preventivo de la moto.
Para cuidar tu moto como se merece, confía en el Seguro de Moto MAPFRE, que cuenta con coberturas como la libre elección de taller, para que puedas llevar tu moto a donde prefieras, un taller de confianza u optar por nuestros talleres distinguidos o Centros del Automóvil.
Comentarios (0)