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El concepto “Scooter” se define como una manera sencilla de moverse por ciudad. Con el paso del tiempo, esta tipología de moto se ha sofisticado tanto que, en ciertas ocasiones, olvidamos su verdadero origen: motos pequeñas, ágiles, sencillas, urbanas y capaces de transportar lo impensable. Kymco, con su Agility Carry, recupera este concepto “scooter”.

Un nuevo concepto de scooter

Esta nueva propuesta, la Agility Carry, aunque en Kymco la posicionan como un scooter dirigida a profesionales, lo cierto es que se trata de una moto de 125 cc que ha sido pensada y, por tanto, diseñada para satisfacer las más exigentes necesidades de carga de cualquier empresa del sector logístico, para afrontar con éxito los desplazamientos diarios urbanos o incluso interurbanos. También es muy útil para llevar el equipaje, aunque debes tener en cuenta las limitaciones de peso y volumen.

Es también una opción válida para quién necesite un vehículo capaz de resolver cualquier problema de almacenaje, ya que, aunque no lo parezca, puede transportar hasta 20 kilos en su parrilla trasera y otros cinco en la delantera; ambas parrillas de generosas dimensiones, a lo que habría que añadir el suelo plano que le aporta otro amplio espacio para ubicar objetos entre las piernas.

Lógicamente, su imagen exterior puede resultar un tanto sorprendente; quizá incluso exagerada para algunos, pero nadie puede negar que la Agility Carry es original en todos los aspectos.

El asiento, muy amplio y cómodo, en su versión original pierde la capacidad de albergar un pasajero dado que la parrilla porta bultos trasera ocupa un buen espacio. Este asiento, lo que si puede, es esconder en su interior un casco tipo jet.

La parrilla delantera que soporta en su parte inferior el faro y los intermitentes ofrece la posibilidad de ubicar en ella, gracias a su estudiado diseño, cualquier bulto o maleta que se puede asegurar con unas cintas elásticas.

El resto no es otra cosa que un “Scooter” tradicional impulsado por un motor mono cilíndrico de cuatro tiempos que aporta casi diez caballos de potencia, gestionado por inyección electrónica, lo que es sinónimo de pocos problemas, mínimo mantenimiento y muy poco consumo (2,6 l a los 100 km en recorrido urbano) gracias al rendimiento de este motor que procede del modelo Agility City.

La frenada se confía a un disco de 220 mm en la rueda delantera que se acciona con una pinza de tres pistones. En la rueda trasera se mantiene también un disco sobredimensionado, de 200 mm; esta combinación asegura la efectividad del sistema CBS (accionamiento proporcional de ambos frenos: delantero y trasero en frenada).

Perfecta movilidad por ciudad

Hay otros muchos detalles que avalan la eficacia de este modelo pensado para un uso en ciudad: el depósito de seis litros de capacidad con llenado lateral para mayor comodidad, la altura del manillar rebajada para un mejor dominio de todo el conjunto, sin olvidar las llantas de 12 pulgadas, detalles todos ellos que le confieren un equilibrio perfecto para moverse por el denso tránsito de cualquier ciudad, y su precio: 1.999 euros.

Kymco, ha querido volver a plantear el concepto “Scooter” no solo como una opción de movilidad, sino como una solución lógica a las necesidades de quién quiera o deba olvidarse de su automóvil, pero que ello no le obligue a perder capacidad de carga. Eso sí, sin que por ello pueda perder ese encanto -por su misma rareza- de este nuevo, original y práctico “scooter” que aumenta la oferta de la firma Kymco.

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