Ya está aquí la versión eléctrica del reconocido scooter de Peugeot, la Peugeot e-Ludix, un ciclomotor con una facilidad de uso y recarga inusitadas y que puede ser conducido con licencia accesible desde los 15 años.

Reúne las características fundamentales para un uso urbano, ya que es ligera, manejable y ágil, y, aunque no es la primera eléctrica de Peugeot, si resulta la más moderna y atractiva hasta la fecha.

Propulsión eléctrica simple, pero muy bien estudiada

La Peugeot e-Ludix alcanza una autonomía de más de 40 km, ampliables hasta los 50 km con un uso adecuado de su sistema de recuperación de energía por la frenada, siendo estas cotas más que suficientes para un uso por ciudad.

Técnicamente, monta un motor eléctrico Brushless de casi 3 CV que se alimenta con una batería de ion litio de 48 V con 1,6 kW de capacidad, pudiendo alcanzar 45 km/h de velocidad (limitada electrónicamente) para movilizar sus limitados 88 kg de peso, tanto con un solo ocupante como con un pasajero (tiene un estupendo sillín biplaza). A efectos de ubicación en el mercado, cuenta con la categoría de “moto eléctrica ciclomotor”.

Como casi todas las motos de este segmento, dispone de un chasis muy simple, pero muy efectivo, apoyado en un mono-amortiguador trasero y en una horquilla telescópica delantera. Cuenta, además, con freno de tambor trasero y de disco delantero, todo ello movilizado a través de “rueda alta”, lo que contribuye aún más a una manejabilidad excepcional.

Siguiendo las actuales tendencias para este tipo de vehículos, Peugeot ha fabricado su carrocería en material plástico de gran rigidez, sin adornos ni accesorios innecesarios, para dotar a la e-Ludix de una visibilidad netamente minimalista y agradable a la vez.

Batería extraíble y diversos modos de conducción para moverse por la ciudad

El corazón de la Peugeot e-Ludix es su batería de 11 kg de peso que está situada bajo el asiento, junto al cargador, y que es extraíble. Se puede recargar en cualquier enchufe doméstico, tanto en casa como en la oficina o donde nos encontremos en cada momento. No hay duda de que este es uno de los puntos fuertes de esta moto.

Es capaz de recargarse en tan solo 3 horas hasta el 80 % de su capacidad, y en 4 horas hasta el 100 %. Esto genera un coste estimado de unos 25 céntimos de Euro.

Vista la autonomía que aporta (40 – 50 km), se calcula que con un par de recargas a la semana será más que suficiente para una movilidad media urbana.

Es, además, de muy fácil y cómoda conducción, con una posición de pilotaje muy correcta gracias a su manillar ancho y a una altura muy estándar que no crea problemas para personas de una estatura media normal. También destaca por su equilibrio general muy satisfactorio, incluyendo una respuesta de su motor eléctrico muy inmediata e incluso divertida.

El cuadro de instrumentos que se ha ingeniado para la Peugeot e-Ludix está compuesto por una pantalla LCD de 4,4” que, además de los clásicos parámetros (velocidad, diversos indicadores, etc.), informa en todo momento del estado de la carga de la batería.

Esta moto permite a su conductor decidir entre 4 posibles modos de conducción para adaptar sus prestaciones al uso necesario en cada momento y para gestionar también su autonomía:

• Go: es el modo más conservador, ya que alarga al máximo la posible autonomía.
• Boost: es el modo más prestacional, ya que hace entregar toda la fuerza de manera continua.
• Cruise: para comprometer de la mejor manera posible el rendimiento y la autonomía.
• Crawl: para desplazamientos a velocidad muy reducida e, incluso, marcha atrás.

La Peugeot e-Ludix se comercializa en cuatro colores clásicos (blanco, negro, azul cielo y naranja) y con un precio de 3.500 € que incluye una garantía de 2 años o 20.000 km. Su batería está garantizada hasta el 70 % de su capacidad en 1.000 ciclos de carga.

Ficha técnica