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A la hora de vender o comprar un coche de segunda mano, no solo es importante comprobar el estado de vehículo, que tenga toda la documentación en regla, que no tenga ninguna carga o gravamen, multas pendientes, etc., también es importante la cuestión del cobro: ¿cómo pagar un coche de segunda mano de forma segura?

Las estafas en este tipo de transacciones están a la orden del día, de hecho son de las más habituales entre todas las clases de estafas. Sus métodos cambian, se renuevan, constantemente, por eso, toda precaución es poca para protegernos ante una situación de este tipo.

Existen, básicamente, tres modalidades de pago: en efectivo, mediante cheque y por transferencia bancaria.

Si se trata de pagar un coche de segunda mano, cualquier modalidad es buena. Cada una de ellas tiene unas características que la hace más aconsejable en según qué circunstancias. Simplemente hay que tener la precaución de que conste documentalmente la entrega del dinero, a cambio, por supuesto, de la entrega de las llaves y de la documentación del coche.

Pagar un coche de segunda mano en efectivo

La forma más sencilla y más segura es en efectivo. Por efectivo se entienden los medios de pago definidos en el artículo 34.2 de la Ley 10/2010, de 28 de abril, de prevención del blanqueo de capitales y de la financiación del terrorismo, y son:

  • El papel moneda y la moneda metálica, nacionales o extranjeros.
  • Los cheques bancarios al portador denominados en cualquier moneda.
  • Cualquier otro medio físico, incluidos los electrónicos, concebido para ser utilizado como medio de pago al portador.

Sin embargo, en esta modalidad de pago, hay que tener en cuenta –en aplicación de las medidas de prevención y lucha contra el fraude- que si una de las partes es una empresa o profesional existe un tope que no se puede rebasar. Este tope está actualmente en 2.500 euros o su contravalor en moneda extranjera. Es muy posible que en un futuro próximo se rebaje a 1.000 euros.

No obstante, si el pagador es una persona física que justifica que no tiene su domicilio fiscal en España y no actúa en calidad de empresario o profesional, este tope será de 15.000 euros o su contravalor en moneda extranjera.

    Si se han realizado pagos parciales para abonar la transacción, la suma de todos ellos no podrá rebasar en ningún caso los límites señalados.

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    Esta normativa sobre el límite de  pago en efectivo no es aplicable si la transacción se realiza entre particulares. En este caso, por tanto, se puede aceptar cualquier cantidad.

    Pagar un coche de segunda mano mediante cheque

    El pago a profesionales o a particulares mediante cheque es un medio muy seguro, tanto de si se trata de un cheque conformado como de un cheque bancario.

    • Cheque conformado. La entidad bancaria garantiza el posterior cobro reteniendo el importe del cheque en la cuenta del emisor.
    • Cheque bancario. El emisor del cheque es el propio banco, que es quien garantiza el cobro del cheque.

    Pueden parecer lo mismo, pero no lo son. La retención que se practica en la cuenta del emisor de un cheque conformado no está absolutamente exenta de riesgos, ya que puede verse afectada por embargos o concurso de acreedores, cosa que no ocurre con el cheque bancario. Por lo tanto, a la vista de lo expuesto, la modalidad en cuanto a cheques que mejor garantiza el cobro es la del cheque bancario. En conclusión, el cheque bancario es el modo más seguro y efectivo para realizar un pago.

    Como medida de precaución para evitar falsos cheque bancarios, hay que asegurarse de la autenticidad del cheque verificándolo en la entidad emisora presencialmente, por teléfono o por cualquier otro medio posible.

    Pagar un coche de segunda mano a través de transferencia bancaria

    Por último, un medio muy extendido para pagar un coche de segunda mano es a través de una transferencia bancaria. En las compraventas en las que interviene un profesional es el modo de pago más adecuado, porque el dinero llega más rápidamente a su cuenta. Una vez realizada la transferencia, se debe entregar al vendedor el justificante de pago con la firma electrónica del banco. Al quedar por escrito los datos bancarios de las dos partes, la transferencia garantiza la máxima transparencia.

    Sin embargo, este modo de pago no es aconsejable entre particulares. Puede darse el caso de que una vez hecha la transferencia el vendedor desparezca con el dinero y con el coche.

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