Se trata de una discusión ya histórica entre los amantes de los coches, aunque la tracción trasera se ve como algo anticuada, pero en manos de un conductor veterano seguramente puede aportar mejores rendimientos que la tracción delantera.

Por supuesto la tracción delantera no es para nada mala, siendo la más común en el mercado, aunque a pesar de los controles de estabilidad la trasera llega a aportar mayor seguridad que antiguamente, si bien la tracción delantera se sigue considerando más segura en general. 

Además de las tracciones trasera y delantera existe siempre la posibilidad de tracción total o integral a las 4 ruedas, aunque esta es menos frecuente en el mercado actual.

 Dado que cada tipo de tracción tiene sus propias ventajas y desventajas, analizaremos todos estos factores para que cada usuario escoja la que más le convenga. 

Tracción trasera

En ella la potencia del motor se transmite a las ruedas traseras del coche, y fue el sistema de propulsión que se utilizó por primera vez en el automovilismo.

Se sigue utilizando en algunos coches deportivos ya que aporta condiciones más dinámicas a la conducción, aunque con algo más de dificultad de conducción, especialmente en curvas.

En manos de un profesional no es ningún problema y dado que facilita la repartición de peso en cada eje, se consigue una tracción mejorada y un mayor equilibrio también visible en los neumáticos.

Tiende a aumentar el “patinaje” en terrenos adversos, por lo que el control del coche es algo más complejo.

Tracción delantera

Es mucho más común ya que es más fácil conducir un coche con la transmisión de la potencia del motor a las ruedas delanteras junto con la dirección del vehículo. Normalmente el motor también se ubica en la parte delantera, y dado que la tracción delantera no precisa árbol de transmisión, estos coches suelen ser menos pesados y consecuentemente con consumos inferiores. Con tracción delantera se conduce además con más facilidad en condiciones adversas y su mantenimiento en general es menos costoso.

Ventajas y desventajas de cada tipo de tracción

Es evidente que las sensaciones de conducción con ambos tipos de tracción son muy diferentes, aunque desde una perspectiva técnica las ventajas y desventajas de cada tipo de tracción son como sigue:

Fuente: revista Motor Mundial

Ventajas de la tracción delantera

  • Al no requerir túnel de transmisión, cuentan con mayor espacio interior para pasajeros.
  • En conducción sobre nieve son más estables y manejables que con tracción trasera.
  • La construcción es más sencilla y con menos componentes y menor peso en consecuencia.
  • Son más fáciles de fabricar y más económicos.

Desventajas de la tracción delantera

  • Aporta un nivel de tracción inferior ya que el equilibrio entre ambos ejes es menor.
  • Con un motor pesado en la delantera, el coche se puede desviar un poco en aceleraciones bruscas.
  • Menor ángulo de giro.

Ventajas de la tracción trasera

  • Conducción más ágil sabiendo manejarlo.
  • El motor puede ser central, trasero o longitudinal.
  • Mejor ángulo de giro al separar la tracción de la dirección.
  • Mejor tracción gracias al equilibrio entre los ejes.

Desventajas de la tracción trasera

  • Conlleva una conducción más experta y compleja, lo que podría comprometer la seguridad de los ocupantes.
  • Es algo más cara al corresponder generalmente a modelos más deportivos con un coste mayor.
  • Necesita mayores componentes para el reparto de la transmisión, por lo que son más pesados.

En conclusión, se puede afirmar que ninguno de los dos tipos de tracción es mejor que la otra, si bien ante un coche de competición o deportivo conviene una tracción trasera siempre que su usuario sea algo más experto al volante, siendo siempre la tracción delantera más sencilla en todos los aspectos para una conducción más normalizada.

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