Existen múltiples opciones para quienes desean disfrutar de sus escapadas y rutas con total libertad. Una de ellas consiste en llevar la casa a cuestas, aunque para ello previamente se debe saber cómo conducir una caravana. Además, en este tipo de vehículos aplican una serie de normas diferentes a los coches convencionales.

¿Qué carnet se necesita para conducir una caravana?

El carnet que se necesita para conducir una caravana depende del peso del conjunto. Así, se puede utilizar el permiso B en los siguientes supuestos:

• Cuando la caravana excede de 750 kg, pero el conjunto no supera los 3.500 kg.
• Cuando la caravana pesa menos de 750 kg y el conjunto no sobrepasa los 4.250 kg.

Si no se cumplen estos requisitos, es preciso sacarse el carnet B96 o B+E. En ambos casos se debe poseer el permiso tipo B y superar los correspondientes exámenes prácticos:

• El carnet B96 se necesita cuando la caravana pesa más de 750 kg, el vehículo tractor tiene una MMA (Masa Máxima Autorizada) inferior a 3.500 kg y el conjunto no supera los 4.250 kg.
• El carnet B+E, cuando el conjunto excede los 4.250 kg, pero el coche y la caravana por separado no pueden sobrepasar los 3.500 kg.

Límites de velocidad para conducir caravanas

La conducción de una caravana implica una serie de riesgos como consecuencia de su gran volumen. Por ello, se debe respetar unos límites de velocidad inferiores a los que están fijados para los vehículos convencionales:

• 90 km/h en autopistas y autovías.
• 80 km/h en vías secundarias con más de un carril por sentido o con un arcén que tenga como mínimo 1,5 metros de ancho.
• 70 km/h en el resto de carreteras secundarias.
• 50 km/h en zonas urbanas.

Consejos para conducir una caravana

Dado que una caravana es un vehículo especial, es importante seguir algunos consejos para realizar una conducción segura:

• En este supuesto es aún más importante revisar los neumáticos antes de iniciar un viaje, tanto del vehículo tractor como del remolque.
• Todos los pasajeros deben ir sentados con su correspondiente cinturón de seguridad o, en el caso de los niños, con un sistema de retención infantil adecuado. No hay que olvidar que está prohibido ocupar el habitáculo de la caravana mientras la misma se encuentra en movimiento.
• Es importante llevar una conducción suave para mantener la estabilidad del conjunto durante todo el trayecto.
• Siempre se debe circular a una velocidad constante, aunque si el viento es muy fuerte, conviene levantar el pie del acelerador e incluso parar el vehículo hasta que las condiciones meteorológicas mejoren.
• Durante la conducción de una caravana es indispensable mirar continuamente por los retrovisores. Estos espejos deben sobresalir alrededor de 20 centímetros de la anchura del vehículo para tener una mejor visibilidad.
• El motor del coche puede verse dañado si se pretende realizar largas subidas en un corto espacio de tiempo. Del mismo modo, los frenos se pueden deteriorar si ocurre lo mismo al bajar las cuestas.
• Se debe mantener una distancia de seguridad con los vehículos que preceden mucho mayor que cuando se circula con un turismo. Debido al peso de la caravana, el tiempo que se tarda en detenerse por completo en caso de una frenada de emergencia es considerablemente superior.
• Es conveniente que los adelantamientos se hagan siempre con precaución y, en la medida de lo posible, no se debe rebasar a más de un vehículo al mismo tiempo.

Aunque se tengan en cuenta todas estas recomendaciones para conducir una caravana, siempre puede haber algún despiste. Para minimizar los riesgos, lo mejor es ir protegido con un Seguro de Coche MAPFRE que cubre la responsabilidad civil por remolques y caravanas, así como por los objetos transportados en el vehículo, entre otras garantías.