Tiempo de lectura: 3 minutos

Todos hemos accedido a la zona del motor del coche para tareas simples como medir el aceite o rellenar el líquido limpiaparabrisas. Poco más se puede hacer. Hace algunos años, al levantar el capó, uno podía encontrarse de bruces con una maraña de cables, conductos, manguitos y piezas metálicas enmarcando un bloque motor que quedaba perfectamente a la vista.

Sin embargo, hoy en día esa experiencia ha quedado algo obsoleta, ya que la mayoría de los vehículos actuales esconden sus piezas bajo enormes tapas de plástico negro, cuya función principal, a parte de la mera cuestión estética, es servir de aislamiento acústico.

No obstante, aún se pueden percibir las principales partes del motor del coche. ¿Quieres conocerlas?

Este motor, que corresponde a un Renault Dacia Logan, se compone de las siguientes partes:

Varilla de aceite

Esta varilla nos permite saber la cantidad de aceite que hay en el cárter, tarea que debe hacerse cada mil kilómetros, en un lugar llano y con el motor apagado y en frío. Para ello, solo tienes que desenroscarla, sacarla, limpiarla con un trapo, introducirla de nuevo y volverla a sacar. Si la marca de aceite está entre las señales de máximo y mínimo, quiere decir que está todo correcto.

Depósito del aceite

Uno de los componenetes relevantes en el sistema del motor es el depósito del aceite, ya que se encarga de almacenar el lubricante que recorrerá las piezas del motor cuando esté en funcionamiento, evitando así la fricción entre ellas.

Si la varilla medidora revela que hay poco aceite, debes rellenar el depósito. Es importante hacerlo poco a poco e ir comprobando los niveles y, sobre todo, echar siempre el mismo tipo de aceite.

Sistema de inyección

El sistema de inyección se compone de una bomba de desplazamiento que, gracias a unos émbolos que van unidos a cada inyector, inyecta el combustible necesario al motor para que realice la combustión.

Las averías en los inyectores son una de las más temidas ya que su reparación es muy elevada. Por eso, es importante estar atento a los síntomas de un mal funcionamiento.

Motor

El motor es el corazón del vehículo, el encargado de convertir el calor producido por la combustión (en los diésel) o por la explosión (en los gasolina) en movimiento lo suficientemente potente como para hacergirar las ruedas y mover el coche. Generalmente está tapado con un recubrimiento plástico negro.

Depósito del líquido de frenos

El depósito de líquido de frenos contiene la cantidad adecuada de este líquido en el sistema, y su función es posibilitar la transmisión de la fuerza ejercida en el pedal de freno a las ruedas del coche. Sin él, se pueden generar serios problemas en el sistema de frenos, dando lugar a situaciones muy peligrosas.

Por ello, es importante revisar siempre sus niveles y que estén en buen estado.

Depósito del líquido refrigerante

Este depósito transparente contiene el líquido refrigerante o anticongelante, cuya función es absorber el calor generado por el motor para evitar un sobrecalentamiento, y al mismo tiempo evitar que las piezas se congelen en invierno.

Suele ser de color verde o rosa. Y, como en el resto de líquidos, hay que vigilar que esté siempre en los niveles adecuados. En este caso, entre las marcas de máximo y mínimo.

Batería

La batería es el elemento encargado de proporcionar la energía eléctrica necesaria para la puesta en marcha del motor y aporta alimentación a los equipos eléctricos cuando el vehículo está parado.

Colector de admisión

El colector de admisión es un conjunto de tubos por los cuales circula el aire para dirigirse a las canalizaciones de la culata. En su interior se esconde el caudalímetro (encargado de medir la masa de aire que entra al propulsor) y el filtro de aire.

Esta pieza proporciona una conducción sin tirones y un consumo de combustible adecuado.

Depósito de aceite hidráulico

El sistema de dirección hidráulica, gracias al cual no tenemos que hacer fuerza para girar el volante, se compone de un circuito hidráulico que se encarga de hacer la parte más dura del trabajo. Uno de sus elemento es este: el depósito, donde se almacena el aceite hidráulico que, en su estado fresco, tiene un color frambuesa, y se torna marrón cuando está viejo.

Alternador

En la zona delantera del motor se encuentra el alternador (no aparece en la imagen del ejemplo), una pieza metálica con forma de rueda y cables de cobre en su interior, que se encarga de suministrar electricidad al vehículo durante la marcha y que, a su vez, recarga y mantiene la carga de la batería.