Muchas de la averías que puede sufrir nuestro coche no son tan dramáticas como habíamos imaginado, pero otras pueden dejar nuestro bolsillo temblando. En los casos más extremos, las reparaciones más caras de los coches pueden hacer que incluso sea más rentable adquirir un nuevo coche que arreglar la avería. Además, con uun Seguro de Coche MAPFRE puedes tener también las coberturas idóneas para que cualquier percance se salde de la forma más satisfactoria posible.

En cualquier caso, es bueno saber cuáles pueden resultarnos más caras para estar preparados y buscar el lugar más adecuado para que lo solucionen sin gastar más de lo necesario.

Para evitar en la medida de lo posible estas averías, los expertos recomiendan cuidar determinados aspectos de la conducción y realizar el mantenimiento adecuado del coche, dos factores fundamentales.

Las 5 averías más caras de coches

La caja de cambios

La caja de cambios es un componente imprescindible del sistema de transmisión del vehículo. Su función es hacer de intermediaria entre el cigüeñal y las ruedas de manera que estas obtengan el par motor necesario para poner en movimiento el vehículo desde parado y vencer las resistencias al avance, subiendo y bajando la cantidad de revoluciones para sacarle el máximo partido al motor. Es decir, si no hubiera caja y el motor tuviera que encargarse de transmitir de manera directa el giro a las ruedas, solo podríamos desplazarnos en llano.

Es, pues, un elemento imprescindible, y su avería es una de las más temidas. El valor de las piezas de recambio, más las horas que invierte el mecánico en su reparación (entre nueve y diez) hacen que su precio pueda ascender a más de 4.500 euros si la caja es manual, y 7.600 euros, si es automática.

Evitar los acelerones y las salidas bruscas es lo mejor que podemos hacer para conservar la caja de cambios en buen estado.

Culata

La culata es la parte superior del motor de combustión interna que permite el cierre de las cámaras de combustión. Su buen estado es fundamental, ya que afecta directamente al funcionamiento global del motor. Su reparación puede llevar más de quince horas de trabajo, y la cuenta final probablemente no bajará de 3.500 euros.

Si quieres evitar esta avería, ten siempre controlados los niveles de aceite y refrigerante, y cámbialos cuando sea necesario.

Correa de distribución

Otro de los quebraderos de cabeza para todo propietario de un vehículo es la rotura de la correa de distribución. Este sistema es el que se encarga de sincronizar el giro del cigüeñal con el árbol de levas para que las válvulas trabajen con la precisión necesaria.

Lo cierto es que es una avería muy previsible, siempre y cuando se realice el mantenimiento adecuado del vehículo y se cambie la pieza cuando sea necesario (su precio no es elevado). Pero si se rompe (y peor aún, con el motor en marcha), no solo puede provocar graves averías en otros componentes del motor, sino que además su precio podrá ascender a los 3.000 euros.

Turbo

El turbo es un tipo de compresor con una turbina conectada con los gases de escape y su función es incrementar el rendimiento del motor, sobre todo en vehículos de gama deportiva. Requiere más de cinco horas de mano de obra y su coste total podría llegar a unos 2.900 euros.

El exceso de temperatura, el desgaste de las piezas o la falta de engrase pueden acelerar su deterioro. Para evitarlo, se recomienda dejar el coche en ralentí durante treinta segundos antes de emprender la marcha, y otros treinta antes de apagar el motor. Además de no realizar una conducción brusca.

Volante motor

Es la pieza circular que se encuentra situada en el extremo del cigüeñal. Su función es regular el giro del cigüeñal manteniéndolo constante. Junto a él se encuentra el embrague, que transmite el movimiento del motor a la caja de cambios y, posteriormente, a las ruedas.

La pieza es cara (cerca de 2.000 euros) y su reparación lleva aparejadas muchas horas de trabajo (unas doce), ya que para acceder al volate motor hay que desmontar otros elementos de la distribución y del motor. En total, la suma a pagar ascendería a más de 2.300 euros.

Si tienes que sustituir el embrague, no está de más echarle un vistazo al volante motor y, si está en mal estado sustituirlo. Si notas que te cuesta meter las marchas y sientes vibraciones en el pedal, entonces debes ir al taller para que lo reparen.

Ya lo sabes, si no quieres pagar demasiado en reparaciones, lo mejor es cuidar tu vehículo realizando el mantenimiento cuando toque y realizando una conducción tranquila y sin brusquedades.