Aunque en un primer momento se valoró la posibilidad de incluir la prohibición de vender y matricular coches diesel en España en 2040, finalmente esta propuesta no se ha incluido en la Ley de cambio climático y transición energética que sí incorpora ambiciosos objetivos para España en línea con las recomendaciones de Europa.

Escenario europeo para la transición energética

España ha aceptado el reto de luchar de forma activa y efectiva contra el cambio climático. El Gobierno apuesta por medidas transversales y a largo plazo, pues reconoce que no son metas sencillas de cumplir en poco tiempo.

La Comisión Europea ha marcado a todos los países miembros una ruta a largo plazo con la que España se alinea y que reclama que el parque automovilístico se renueve paulatinamente con modelos de menores emisiones para culminar en 2040 con vehículos de cero emisiones.

Dentro del paquete de energía y clima que se ha presentado por el Gobierno, se incluyen tres instrumentos diferentes pero complementarios que recogen las actuaciones previstas por España para conseguir cumplir con las exigencias medioambientales dictadas desde Europa.

  • Estrategia de Transición Justa.
  • Plan Nacional Integrado de Energía y Clima.
  • Ley de cambio climático y transición energética.
  • Plan de Acompañamiento para la Automoción.

Anteproyecto de Ley de cambio climático

  • A partir de 2040 los coches nuevos serán de cero gramos de emisiones de CO2, según el objetivo marcado en el previo de la Ley de cambio climática española.
  • La ley no plantea en su anteproyecto una prohibición concreta de los coches diésel ni gasolina, sino que, para respetar el principio de neutralidad tecnológica, solo marca como objetivo que los vehículos cumplan con cero emisiones con independencia de cómo se propulsen.
  • La tecnología actual no hace posible que los coches diesel ni gasolina no emitan CO2 al aire, pero en el plazo de más de 20 años -2040- está posibilidad remota no puede negarse por completo. En este caso, esos vehículos no estarían prohibidos si la ley prevista está vigente entonces.

Plan de Acompañamiento para la Automoción

El sector de la automoción está directamente afectado por la transición que se impulsa desde Europa hacia el coche eléctrico y otros tipos de transporte de emisiones cero. En el caso de España, la Ley viene acompañada por un Plan de Acompañamiento para la Automoción.

El Gobierno ha informado de que el Plan tiene por objeto ayudar a la adaptación de la industria. La gran meta es lograr que los nuevos coches y sus componentes -como las baterías de los eléctricos-  se fabriquen en España para lo que es necesario que el sector apueste por la investigación y la innovación para atraer la inversión.

Plan Nacional Integrado de Energía y Clima

La Comisión Europea debería haber recibido de España para su análisis el Plan Nacional Integrado de Energía y Clima antes de finalizar 2018. Bruselas debe emitir un juicio sobre las propuestas españolas y dictaminar si son adecuadas para conseguir cumplir con los objetivos comunitarios.

Entre las medidas que incluye esta plan, el Gobierno ha confirmado que se van movilizar 200.000 millones de euros en inversión en energías renovables de aquí a 2030, de los que más del 75 por ciento corresponderán al sector privado. El paquete normativo generará 300.000 puestos de trabajo, según las cuentas gubernamentales.

El Plan no depende de las leyes nacionales, según ha asegurado el Gobierno, lo que significa que podría ejecutarse sin la necesidad de que esté aprobada la Ley de Cambio Climático o la estrategia de Transición Justa.

Acuerdo de París

El 12 de diciembre de 2015 y tras cuatro años de negociaciones, se adoptó el Acuerdo de Paris -COP21- , un acuerdo global de cambio climático de carácter vinculante y en el que todos los países se comprometen a participar en las reducciones globales de gases de efecto invernadero.

    España ratificó ante Naciones Unidas el instrumento el Acuerdo de París el 12 de enero de 2017. La Ley española de cambio climático recoge la propuesta -hoja de ruta- de España para cumplir los objetivos y metas marcados en el Acuerdo de París:

    • Evitar que la subida de la temperatura global media del planeta pase de los 2 grados respecto a los niveles preindustriales.
    • Reducir los riesgos y los impactos del cambio climático en todo el mundo.
    • Las emisiones globales no solo tienen que dejar de crecer, sino que deben reducirse drásticamente.
    • La neutralidad en las emisiones -equilibrio entre emisiones y absorción- es la meta a largo plazo, para 2050.

    La prohibición de coches diésel y/o gasolina ha quedado suspendida en España, pero en 2040 se mantiene como objetivo no permitir vehículos nuevos que no cumplan con el objetivo cero en emisiones de CO2.

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