Diferencias entre matrículas metálicas y plásticas

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Las tradicionales placas de chapa metálicas en los vehículos ya se consideran cosa del pasado. De hecho, solo se pueden ver en los modelos que tienen una cierta antigüedad y que sus dueños se resisten a cambiar. Hoy en día, las grandes protagonistas son las matrículas de plástico autorizadas por la Unión Europea.

A diferencia de las antiguas, las euromatrículas están fabricadas con material acrílico y plástico. De esta forma, los vehículos se identifican de una forma más sostenible, ya que se pueden reciclar por completo, y resultan más seguras. Atrás quedan los múltiples daños que causaban las placas metálicas durante su manipulación o en los accidentes.

¿Por qué cambiar a las matrículas de plástico?

Aunque las diferencias entre las placas metálicas y las matrículas plásticas son más que evidentes, es interesante repasar algunas de las más importantes:

Características de las matrículas plásticas

• Las matrículas de plástico presentan una gran resistencia a los golpes. Esto permite que se mantengan intactas después de sufrir un impacto o accidente con otro vehículo, algún objeto.
• Según la calidad de los materiales empleados en la fabricación, la resistencia a los rayos UVA y a las altas temperaturas puede variar. En el peor de los casos, estos elementos pueden sufrir un deterioro prematuro y durar menos tiempo del esperado en función de las inclemencias del tiempo que tenga que soportar.
• El acrílico y el plástico presentan una mayor seguridad que las chapas de metal. Además, los bordes redondeados de las matrículas actuales minimizan el riesgo de cortarse al pasar la mano cerca de las mismas.
• Las matrículas plásticas son 100% flexibles, lo que permite doblarlas y retorcerlas sin miedo a que se rompan. Asimismo, esta propiedad deriva en una mejor adaptación a la estructura y forma del vehículo.
• El material plástico se limpia más fácilmente que el metálico, pasando simplemente un paño humedecido en agua y algún producto limpiador. Además, las nuevas matrículas no presentan ningún relieve en los números y letras, por lo que es una clara ventaja a la hora de eliminar la suciedad y los restos de insectos que se van adhiriendo.
• Los componentes de las euromatrículas son totalmente reciclables. De esta forma, se produce un nuevo plástico que sirve para fabricar otro tipo de objetos.
• En cuanto a la durabilidad de las nuevas placas, se puede decir que tienen la misma vida útil que el vehículo donde se colocan.

¿Qué precio tiene cambiar la placa?

En la actualidad, todos los nuevos modelos que salen de los concesionarios incorporan las matrículas de plástico. En el caso de que sea necesario cambiar la placa del vehículo por cualquier motivo, es necesario tener en cuenta que no toda la oferta cumple con los requisitos de homologación de la Unión Europea.

Para evitar problemas, es aconsejable solicitar el certificado que acredita que la placa se ajusta a la normativa. Asimismo, es necesario comprobar que la referencia que aparece en el lateral de la matrícula coincide con el número que se especifica en el documento justificativo.

El precio de adquisición de una de estas placas oscila entre 10 y 50 euros. En el momento de la compra, se debe presentar la siguiente documentación:

• Permiso de circulación del vehículo
• DNI del comprador

En estos casos, la mejor opción es solicitar la matrícula al concesionario oficial para realizar la transacción con plenas garantías, las mismas que ofrece un Seguro de Coche MAPFRE con la tranquilidad de saber que se puede contar con la máxima protección durante la conducción.