Lo primero que debes hacer es un lavado lo más inmediato posible, aunque lo normal será que por el calor las gotas de resina se hayan resecado y no salgan con esta limpieza.

Veamos a continuación las alternativas a llevar a cabo para poder eliminar la resina del coche:

  1. Un lavado con agua caliente a presión, que es más efectivo que uno tradicional, utilizando el chorro de forma oblicua para que haga las veces de una espátula, aunque ablandando previamente con agua caliente antes de insistir con el chorro a presión.
  2. Un truco casero si no se puede quitar la resina del coche, es ablandarla con aceite de oliva y dejar que actúe durante unos 10 minutos antes de intentar de nuevo con agua caliente a presión.

Fuente: Revista Motor Mundial

  1. Otra posibilidad es utilizar un disolvente específico de los que hay en el mercado.
  2. La siguiente posibilidad para limpiar la resina del coche es utilizar una “clay bar” para eliminar los residuos.
  3. Por último, si no conseguimos resolver el problema recomendamos acudir a un lavado profesional, aunque este proceso suele resultar algo caro.

Cómo quitar la resina de los cristales

En los cristales es prioritario quitar estas machitas de resina ya que reducen la visibilidad y dañan de manera muy directa las escobillas limpiaparabrisas.

Fuente: Revista Motor Mundial

Limpiar los cristales de resina es más fácil y en el mercado hay diversas espumas a disposición (en droguerías o centros comerciales e incluso en gasolineras) que se aplican sobre el cristal y cambian rápidamente de color hacia un tono amarillento mientras desincrustan toda la suciedad de estos. Pasados unos segundos, con un papel de cocina, el cristal queda impoluto.

Qué es una “clay bar” y cómo se utiliza

Fuente: Revista Motor Mundial

Se trata de una barra de una arcilla muy especial, similar a la plastilina que es capaz de recoger por adherencia todos los contaminantes pegados a la carrocería.

Esta barra ni pule, ni desgasta la carrocería ni la pintura y deja las superficies suaves y con un buen acabado, aunque no excesivamente brillantes. Su utilización es realmente laboriosa.

Antes de su aplicación hay que lavar el coche y tiene además la ventaja que al no actuar químicamente se puede utilizar también en los plásticos, los cristales y demás superficies.

Los resultados suelen ser espectaculares y si tras utilizar la “clay bar” se realiza un encerado correcto, prácticamente dejaremos la carrocería como nueva.

Fuente: Revista Motor Mundial

Nunca se debe lavar el coche con la pintura caliente y siempre es mejor hacerlo a la sombra, sin que el sol incida directamente sobre el coche, siendo los pasos para aplicar la “clay bar” los siguientes:

  1. Lavar el coche con agua y jabón y acláralo bien.
  2. Utilizar el pulverizador que suele venir con la “clay bar” junto con agua y jabón (para dar cierta lubricación) en cada movimiento. Pasar por todas las zonas con suavidad. Se notará al principio algo de rozamiento y asperidad que se irá suavizando a medida que la superficie queda totalmente limpia.
  3. Seguir utilizando la “clay bar” amasándola para mantener la parte limpia a la vista en su utilización.
  4. Una vez limpiadas todas las zonas conviene volver a lavar el coche y secarlo.
  5. Una vez seco, una buena aplicación de cera dejará el coche en perfectísimo estado.

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