Naked tricilíndricas Triumph, MV Agusta y Yamaha
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Cuando hablamos de motores de tres cilindros es inevitable citar que éstos mezclan las ventajas de las bajas revoluciones del bicilíndrico y la potencia de las altas del tetracilíndrico.
El motor de tres cilindros combina las ventajas del bicilíndrico y el tetracilíndrico.
Esta configuración y comportamiento tan particulares ha sido aprovechado por los fabricantes, sobre todo en el segmento de las naked de peso medio, que ofrecen una gran agilidad por su tamaño y ligereza, así como también un buen rendimiento de potencia. Por lo tanto, no te pierdas la descripción de tres de las naked tricilíndricas más interesantes: Triumph Street Triple 675, MV Agusta Brutale 675 y Yamaha MT-09.
Triumph Street Triple 675
El motor de esta Triumph Street Triple 675 era de tres cilindros de 675 cc y rendía 106 cv. Conseguía destacar su entrega lineal de potencia, incluso en bajas y medias revoluciones.
Sin duda, este motor se exprimía al máximo gracias a una excelente parte ciclo, tanto en ámbito urbano como en su dimensión deportiva. La Triumph Street Triple heredó la capacidad de la Triumph Speed Triple y la agilidad deportiva de la Triumph Daytona 675, algo que se apreciaba en sus prestaciones y comportamiento general.
El chasis estaba asentado en una doble viga en aleación de aluminio, algo que le daba un toque mucho más ligero y ágil. La característica posición de los escapes bajo el asiento se sacrificó para colocar un escape en el lateral y mucho más abajo. Gracias a esta innovación, esta motocicleta consiguió mejorar su comportamiento, reducir su peso y mejorar la distribución de masas.
MV Agusta Brutale 675
Con este modelo, la marca consiguió atraer a un público mucho más práctico y que buscaba la accesibilidad, pero sin olvidar la calidad. Con un diseño espectacular y ciertamente agresivo, destacaba su motor tricilíndrico muy compacto (similar al de la supersport MV Agusta F3 675) y con una potencia de 110 CV. El cambio semi-automático facilitaba la marcha en el momento en el que se querían apretar los dientes.
En cuanto al chasis (mezclando estructura tubular y bloques de aluminio) y conjunto, hay que decir que sus dimensiones la hacían muy apta para gente de cualquier talla. El basculante monobrazo era marca de la casa y junto a una cómoda posición del manillar, ofrecía muy buenas sensaciones. Además, sólo pesaba 163 kg, el mejor dato en este aspecto de las tres motos comparadas.
El control de tracción de 8 niveles y los 4 mapas de potencia eran fácilmente configurables desde la pantalla digital, algo que sumaba puntos positivos a la MV Agusta Brutale 675.
Yamaha MT-09
Este modelo ha sido uno de los que más ha dado que hablar. La Yamaha MT-09 tenía una vertiente polivalente y ofrecía una serie de cualidades de comodidad y agilidad similares a las de sus rivales. A diferencia de la Triumph y la MV Agusta, la Yamaha MT-09 tenía una mayor cilindrada (847 cc) lo que le aportaba una mayor potencia y una respuesta realmente espectacular.
Gracias a su filosofía “crossplane” se podía disfrutar de una rápida respuesta del acelerador junto a un par alto, tanto en bajas como en medias revoluciones. Este es un punto que la convirtió en una moto mucho más exigente que las otras dos.
En el momento de su lanzamiento se consideró un modelo pionero gracias a importantes avances electrónicos como el YCC-T (acelerador electrónico ya utilizado en las YZF-R), consumos muy ajustados y tres mapas de encendido que aportaban una gran variedad de comportamientos.
La agilidad de la Yamaha MT-09 también se conseguía por sus dimensiones compactas y su bajo peso (171 kg). El conjunto del chasis estaba formado por dos partes de aluminio destacando su reducido tamaño. La posición del conductor era más elevada para poder controlar mejor las reacciones de esta pequeña bestia.
En este modelo tampoco podían faltar otros componentes como frenos ABS, horquilla, suspensiones revisadas o llantas de aluminio.
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